LIBRO VOCACIONAL RECOMENDADO
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MONS. VINCENZO PAGLIA

L´EVÊQUE ET SON DIOCÈSE

(El obispo y su diócesis)

 

Editions Lessius, Bruxelles 2010, 187 páginas

 

 

¿Cómo ser pastor en la Iglesia de comienzos del siglo XXI? A esta pregunta trata de responder este pequeño libro francés.

Desde su propia experiencia pastoral como obispo y la exhortación apostólica "Pastores gregis" de Juan Pablo II  (publicado en 2003), el autor presenta el ministerio episcopal. El hilo conductor del libro es el discurso de despedida del apóstol Pablo a los ancianos de Éfeso  (Hech 20, 17-38), paradigma sin duda de la misión apostólica. El libro comienza con la  "paradoja de  vida del obispo," llamado a ser "buen pastor", es decir, manso y humilde en un mundo de violencia, y servidor en un mundo de poder, teniendo siempre como modelo a su Señor. Por ello debe estar impregnado por la Palabra de Dios, al que se le encarga  proclamarla con entusiasmo, y siempre alimentado por la Eucaristía, fuente y culmen  de la Iglesia.

En los siguientes capítulos, el autor actualiza las dimensiones clásicas - santificar, gobernar, enseñar - presentando y desarrollando  rasgos menos evidentes de la figura del obispo: ser padre de los pobres, atento  a los que se ven privados del pan cotidiano o del pan de la Palabra; el hombre de paz, inmerso en la sociedad civil al servicio de la reconciliación y de la dignidad de todos; el promotor del diálogo entre cristianos y creyentes de las otras religiones; el hombre interior, que saca de la oración confianza y  audacia; y antes de terminar con la vida espiritual, el autor también analiza y resalta el lugar del Evangelio en un mundo que espera y busca la paz.

Pero más allá de centrarse en  la figura del obispo, el autor presenta el arte de la pastoral, que concierne a todos aquellos que han recibido el encargo  de guiar al pueblo de Dios. Así, los sacerdotes pueden sacar de este libro  lecciones para su propia manera de ser y sobre su presencia en la Iglesia y en el mundo. Frente a la tentación nostálgica de algunos sacerdotes en Occidente, el autor afirma que "el cristianismo vive siempre en una situación de lucha, que no tiene que ver con la persecución sino con la radicalidad evangélica "(p. 116). En los consejos para la  proclamación de la Palabra de Dios, reitera la importancia de la homilía, su preparación, su adaptación al auditorio: "A este respecto, la improvisación es sencillamente inaceptable ! "(P. 54). Sin embargo, hay que señalar que aquellos que busquen recetas quedarán totalmente decepcionados con este pequeño libro.

Nuestra página web apoya totalmente la insistencia del autor sobre la fraternidad sacerdotal. Ahí nos jugamos nuestro ser. Una fraternidad que "no es ni obvia ni natural" (p. 33), que requiere una cierta ética, y sigue siendo un activo valioso y preciso para toda la Iglesia. Una fraternidad de la cual el propio obispo es solidario.

Este retrato del obispo, sin grandes elucubraciones pero exigente, interesará e interpelará más ampliamente a toda persona, sacerdote o laico, ejerciendo responsabilidades en el servicio de una comunidad cristiana. De fácil lectura y comprensión.