Notó ella algo en la respuesta, pero no supo a qué venía. Que los curas no lleven ahora ningún distintivo que les distinga, a veces es un lío.

     «Hay hombres que tienen por única misión servir de intermediarios. Se pasa a través de ellos como por un puente y se sigue hacia adelante», escribió G. Flaubert hace más de cien años.
     San Pablo muchos siglos antes dijo lo mismo con una sola palabra, pontifex, que no sólo quiere decir «hacer puentes» sino «hacer de puente».
     Los años y la pereza de no pocos pontífices han ido oscureciendo la palabra y el oficio.
     Buena cosa irlos remozando hoy. Con hechos, claro.