 |
 |
 |
 |
 |
 |
|
Fue el 13 de noviembre, en Buenos Aires. La buena y madura señora que nos guiaba hacia Villa Comunicaciones, dijo refiriéndose a un seminarista, que ella conocía, más joven que mis acompañantes: «es más pichoncito que ustedes».
Ernesto me escribe hoy felicitándome la Navidad y firma «un pichoncito de cura».
He sonreído. Porque es una buena traducción de la palabra «seminarista».
|
|
 |
 |
 |
 |
 |
 |
|